Una tarde de paseo por la Ribera de Córdoba.
Siempre hablo con mis novios de que realizar la sesión de la preboda para mí es algo súper importante, es ahí donde conecto con las parejas , ellos se relajan y se olvidan un poco de que yo estoy por ahí. Así se acostumbran a mi presencia cerca, y lejos, jaja, y el día de la Boda se encuentran relajados porque saben que yo estaré allí, a mi bola , capturando momentos entre ellos, los invidatos, familiares, estaré pendiente de cada movimiento y pasaré desapercibida, porque prefiero pillar fotos sin que se den cuenta, robadas. Ellos ya han visto en la preboda mi forma de trabajar y voy el día de la boda como una invitada más. Eso es lo bonito, que mis clientes llegan a ser mis amigos. Compartir momentos así hacen que la pareja cojan mucha confianza conmigo. Me encanta estar ahí al pie del cañon en cada Boda, con cada pareja, amo mi trabajo.
Martha y Boris son una pareja que no son mucho de expresar sus sentimientos en público, eso me decía ella, jajaja, pero de repente observé que había conseguido lo que yo quería, que pasaran una tarde de complicidad, sin niños, sin trabajar, que pasaran una tarde estupenda entre ellos, llena de juegos y complicidad. Chicos me encantáis!!! Deseando que llegue el esperado día de vuestra Boda!!!